El verano es la época del año en la que se producen más infecciones de orina. Aunque este tipo de infección puede aparecer a cualquier edad (niños, adultos y ancianos), es más habitual en las mujeres con vida sexual activa. Esto se debe a que el conducto a través del cual se expulsa la orina fuera del cuerpo (uretra) es más corto y está más cerca del recto en las mujeres que en los hombres, lo que favorece que las bacterias patógenas procedentes del intestino se instalen y proliferen en las vías urinarias1.
Después de las infecciones respiratorias, las infecciones de orina son las más frecuentes fuera del hospital. El principal problema de las infecciones de orina es que tienen tendencia a volverse recurrentes. De hecho, se estima que 4 de cada 10 mujeres con un episodio inicial de infección de orina tienen al menos una recurrencia en el año siguiente2.
Te contamos cómo puedes identificar si tienes una infección de orina, sus principales causas y las opciones que tienes para mantenerlas a raya.
Síntomas que indican que tienes infección de orina
Aunque hay veces que el aumento del número de bacterias en la orina no se acompaña de síntomas, lo más habitual es que las infecciones de orina se asocien con molestias.
Entonces, ¿cómo saber si tengo infección de orina?
Estos son los síntomas típicos de una infección de las vías urinarias desde la uretra hasta la vejiga3:
- Necesidad frecuente y urgente de orinar
- Dolor o ardor al orinar
- Sensación de tener ganas de orinar a pesar de que la vejiga esté vacía
- Dolor o retortijones en la parte baja del abdomen
Si la infección es más grave, la orina puede volverse turbia por la presencia de sangre y pus en la orina3.
La aparición de fiebre, escalofríos, dolor en la parte baja de la espalda y vómitos puede deberse a que la infección de orina ha subido a los riñones. Ante la presencia de estos síntomas, pide cita a tu médico para que estudie tu caso individual y te paute un tratamiento adecuado4.
Causas de la infección de orina en verano
El origen de la infección de orina es una alteración de la microbiota intestinal y vaginal debida a un sobrecrecimiento de las bacterias patógenas responsables de la infección de orina (principalmente Escherichia coli y, en menor proporción, Staphylococcus saprophyticus, Proteus mirabilis y Klebsiella pneumoniae). Estas bacterias procedentes del intestino y la vagina después consiguen ascender por el tracto urinario y se instalan en la vejiga5.
Además, si antes has tenido una infección de orina, tienes muchas más posibilidades de que se repita debido a que las bacterias permanecen “dormidas” durante meses en la vejiga y, cuando menos te lo esperas, dan lugar a una nueva infección de orina5.
Las causas específicas que explicarían que las infecciones de orina en mujeres sean más frecuentes durante verano son6:
- El calor: la falta de una correcta hidratación agravada por el calor puede aumentar el riesgo de una infección de orina.
- La humedad: el aumento de la humedad en la zona urogenital debido al calor, el sudor y llevar puesto el bañador durante varias horas favorece un desequilibrio de la microbiota vaginal. Esto favorece que las bacterias patógenas se desplacen desde la vagina hasta la uretra y la vejiga.
- Un posible aumento de las relaciones sexuales: las relaciones sexuales y los cambios repetidos de pareja pueden reducir los lactobacilos protectores de la vagina, que en condiciones normales bloquean el acceso de las bacterias patógenas a la vejiga. Esto se debe a un cambio del pH vaginal por el semen y los preservativos y una inflamación de la mucosa de la vagina por el acto sexual.
Otros factores que favorecen las infecciones de orina de repetición son la bajada de estrógenos en la menopausia, la toma de antibióticos que alteran la microbiota íntima, la higiene íntima inadecuada o demasiado frecuente y la bajada de las defensas.
Tratamientos para la infección de orina
Las intervenciones encaminadas a restablecer y mantener el bienestar urinario se basan en bloquear a las bacterias responsables de las cistitis, reducir los reservorios de las bacterias patógenas en el intestino y la vagina, impedir que asciendan por el tracto urinario a través de la uretra y aliviar el dolor7-10:
- Tratamiento antibiótico bajo la prescripción de un médico: teniendo en cuenta que el 90% de las infecciones de orina en verano son producidas por bacterias de la microbiota fecal, es muy posible que tu médico de cabecera te prescriba un antibiótico.
Sin embargo, cada vez aparecen cepas de bacterias resistentes a los antibióticos convencionales. Además, los antibióticos de forma reiterada desequilibran la microbiota intestinal y de las mucosas genitales, lo que da lugar a nuevos episodios de cistitis después de cierto tiempo.
- Tomar paracetamol o ibuprofeno para el dolor, siguiendo el criterio que te recomiende tu farmacéutico.
- Aumentar la ingesta diaria de agua: es una medida muy efectiva para reducir la aparición de nuevas infecciones de orina porque arrastra a las bacterias causantes de la cistitis e impide que se instalen en las vías urinarias.
- Tomar productos a base de arándanos rojos: probablemente ayudan a prevenir las infecciones urinarias en mujeres con infecciones frecuentes, niños y personas susceptibles a estas infecciones.
- Algunas cepas probióticas ayudan a mejorar las molestias urinarias y prevenir las repeticiones en el tiempo: debido a la relación que existe entre la disminución de los lactobacilos vaginales y la aparición de infecciones de orina, la mayoría de las cepas que se han investigado para prevenir o tratarlas son lactobacilos.
La combinación única de las cepas probióticas Lactobacillus plantarum CECT 8675 y L. plantarum CECT 8677 junto con el extracto de arándano rojo americano PAC tipo A y la vitamina C ha mostrado ser capaz de restablecer y mantener el bienestar urinario actuando a 3 niveles: 1) desplazando las bacterias patógenas; 2) impidiendo que se adhieran a la pared de la vejiga y las vías urinarias y 3) aumentando la respuesta inmunitaria a los patógenos y acidificando la orina.
Conclusión
Las infecciones de orina son más frecuentes en verano debido al aumento de humedad en la zona íntima por el calor y el sudor y al aumento de las relaciones sexuales.
Además de beber abundante agua, tomar un probiótico con las cepas de lactobacilos adecuadas, como Lactoflora Ciscare, te ayuda a restablecer la microbiota de la mucosa genitourinaria y fortalecer el bienestar urinario sin efectos adversos.
Por último, los probióticos también ayudan a romper el círculo vicioso de la utilización de antibióticos y la disbiosis intestinal y genitourinaria.
Referencias:
- Simmering JE, Polgreen LA, Cavanaugh JE, et al. Warmer weather and the risk for urinary tract infections in women. J Urol. 2021; 205(2):500-506. doi: 10.1097/JU.0000000000001383.
- Asociación Española de Urología. Cistitis no complicada en la mujer. Guía multidisciplinar. 2008. Disponible en: https://portal.guiasalud.es/wp-content/uploads/2018/12/GPC_506_Cistitis_mujer_2008.pdf (consultado el 6 de julio de 2023).
- Andreu A. Patogenia de las infecciones del tracto urinario. Enferm Infecc Microbiol Clin. 2005; 23(Supl. 4):15-21.
- Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Infección urinaria. 5 de julio del 2022. Disponible en: https://www.cdc.gov/antibiotic-use/sp/uti.html (consultado el 6 de julio de 2023).
- Bonkat G, Bartoletti R, Bruyère F, et al. European Association of Urology Guidelines on Urological Infections. 2023. Disponible en: https://uroweb.org/guidelines/urological-infections (consultado el 6 de julio de 2023).
- Simmering JE, Cavanaugh JE, Polgreen LA, et al. Warmer weather as a risk factor for hospitalisations due to urinary tract infections. Epidemiol Infect. 2018; 146(3):386-393. doi: 10.1017/S0950268817002965.
- National Institute for Health and Care Excellence (NICE). Urinary tract infection (lower): antimicrobial prescribing. 31 de octubre de 2018. Disponible en: https://www.nice.org.uk/guidance/ng109 (consultado el 6 de julio de 2023).
- Rodríguez Gómez JM, Reid G. Probióticos en urología. En: Álvarez Calatayud G, Guarner Aguilar F, eds. Microbiota, probióticos y prebióticos. Evidencia científica. Majadahonda (Madrid): Ergon, 2022. p. 541-547.
- Williams G, Hahn D, Stephens JH, et al. Cranberries for preventing urinary tract infections. Cochrane Database Syst Rev. 2023; 4(4):CD001321. doi: 10.1002/14651858.CD001321.pub6.
- Estudios in vitro de las cepas L. plantarum CECT 8675 y CECT 8677 de AB-BIOTICS, S.A.
Autor
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Farmacéutico, dietista-nutricionista y doctor en comunicación científica en nutrición. Traduce los estudios fiables de nutrición en un lenguaje que se entienda y es profesor de la Facultad de Ciencias de la Salud Blanquerna-Universidad Ramon Llull y de la Universitat Oberta de Catalunya.
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